“Dividend trap” o trampa de la alta rentabilidad por dividendo (o RPD):
Comprar una acción de poca calidad por su alta rentabilidad por dividendo y no considerar su crecimiento o sostenibilidad. Este es uno de los errores más comunes de todos los inversores inexpertos y que lleva a muchos inversores a comprar empresas de baja calidad.
La Rentabilidad por Dividendo es únicamente una de las formas en las que podemos obtener un retorno de nuestras inversiones y se mide como el dividendo cobrado por acción entre el valor de la acción o su precio de compra, pero por sí solo no nos da ninguna indicación de la sostenibilidad del mismo.
No nos debemos fijar únicamente en la rentabilidad bruta por acción para determinar si debemos comprar o no una acción. Existen otros indicadores muy importantes que nos pueden alertar sobre algunos peligros: ¿La empresa está repartiendo más en dividendos de lo que consigue ganar en un año? ¿Se está descapitalizando la empresa? ¿Se emite deuda para poder pagar ese dividendo? ¿El dinero es totalmente en efectivo o se trata de un pago con derechos de ampliación de capital o scrip dividend?
Antes de lanzarte a comprar una empresa sólo por su alta rentabilidad por dividendo, quizá deberías echarle un ojo a esta guía para aprender a invertir en bolsa paso a paso y así evitar algunos de los errores más comunes.
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